No es un monstruo, ni ninguna clase de criatura desconocida. Se trata de Poppy , una gata que vive en Bournemouth (Inglaterra/UK) , y que cuenta con el lujo de ser el felino más viejo de su especie. El gato cumplió 24 años, que equivalen a 114 años humanos y entró en el Libro de los Récord Guinness por ser el felino vivo más viejo del mundo. De hecho Poppy tiene dos años menos que la persona más longeva, la japonesa Misao Okawa. La familia de la gata comentó orgullosa que la longevidad de Poppy se debe a una alimentación a base de pollo de Kentucky Fried Chicken, pescado, papas fritas y también kebab. Su dueña, Jacqui West, dijo que a pesar de su edad, es una gata con mucha energía. Si bien es cierto que es ciega y sorda, la felina no perdió sus ganas de vivir. "Es muy luchona. Si uno de los otros gatos intenta quitarle su comida, se pone agresiva y le muerde las orejas", confesó su dueña. ¡Larga vida para Poppy!
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